Vuelvo a soñarte como cada noche, ya desespera tantas dudas y los pocos motivos que tengo para quererte. Estoy día a día pensando en ti y tú ni siquiera te imaginas que me acuerdo de que existes.
No tiene lógica, es un error y lo sé, pero no soy yo la que controla esa parte de mí.
Solo tengo ganas de volverte a ver, por muy difícil que sea y por lo poco que eso me conviene en realidad.
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