Adiós.

Y el tiempo pasa, las personas se van, los momentos se olvidan, los detalles se pierden.
Hace ya mucho tiempo que te fuiste, ya casi ni recuerdo el brillo paranormal de tus ojos negros, el pelo tan sedoso y fino que tenías, la sonrisa pícara e infantil que iluminaba todo lo que se le cruzaba, ni tus abrazos largos y apretados. Aunque todavía algo queda en mi memoria, todavía me duele no verte, todavía te echo de menos, todavía no he superado la distancia.
Puede que hayan pasado más chicos por mi mente, que ya no te quiera tanto como antes, que ya no te tome tan a pecho. Pero esto es supervivencia, esto es imposible, sé que tu lo ves así.
Así que solo quiero que recuerdes esto: por mucho que me hicieses llorar, desde que te conocí sé que fuistes, eres y serás el amor de mi vida.
Me despido,

adiós.